el cigarrillo ya se terminó y la noche es eterna. Me gusta que sea de noche, que el frío no se sienta. La luz naranja del farol y las plantas en el medio del estacionamiento.
Me gusta que todo tenga ladrillos, que sean gastados y marrones. Sin cubrir, sin tapar. La tierra que se acumula entre cada espacio, el cemento derretido, seco. El cable negro. Colgando como una guirnalda de Navidad. Un tubo de chimenea, o por ahí de gas, torcido que busca el camino por entre la pared. Me gusta el árbol. Hecho un laberinto. Buscando el calor, cada vez más de cerca. La luz es naranja, todas las luces son naranjas. Son más lindas así, más oscuras. Son luces más oscuras.
Uno tras otro, las ruedas chocando contra el piso. Un auto tras otro. Chillan como animales contra el asfalto. Y las ventanas, me encantan las ventanas. También tienen luces naranjas, cuadradas, iguales, parejas. Otras no tienen nada. Un agujero negro en el cemento.
Me gusta estar acá. Me gusta estar conmigo
miércoles, 18 de diciembre de 2019
bosque
atravieso el tiempo y me pierdo en el camino
el viento que tiembla
a veces se hace largo pero
no espero nada.
mi cuerpo tiembla
no siento el frío que entra
cuando miro
todo lo veo.
el olor a musgo
olor a bosque.
siempre fue mi olor
mi preferido.
pienso en todo lo que veo
la montaña que tapa el cielo
es tan alta como las nubes
pero tan alta como los pinos.
hay una colina
donde hay una casa
y puedo ver el sol.
será que también me acompaña
será que nunca estoy sola
será que la luna
no es la única que me abraza.
y si lloro
también me rio.
porque no puedo creer
donde los pies tocan
lo que mis manos alcanzan.
mi cuerpo se siente invencible
inabatible
capaz de soportar
cualquier caída.
nunca tuve miedo
lo que tengo
me lleva pasos más allá.
las palabras
no hablan el mismo lenguaje
ya no sirven
ya no importan.
toco la piedra
húmeda
toco y respiro.
no espero nada
ya me dieron todo
el viento que tiembla
a veces se hace largo pero
no espero nada.
mi cuerpo tiembla
no siento el frío que entra
cuando miro
todo lo veo.
el olor a musgo
olor a bosque.
siempre fue mi olor
mi preferido.
pienso en todo lo que veo
la montaña que tapa el cielo
es tan alta como las nubes
pero tan alta como los pinos.
hay una colina
donde hay una casa
y puedo ver el sol.
será que también me acompaña
será que nunca estoy sola
será que la luna
no es la única que me abraza.
y si lloro
también me rio.
porque no puedo creer
donde los pies tocan
lo que mis manos alcanzan.
mi cuerpo se siente invencible
inabatible
capaz de soportar
cualquier caída.
nunca tuve miedo
lo que tengo
me lleva pasos más allá.
las palabras
no hablan el mismo lenguaje
ya no sirven
ya no importan.
toco la piedra
húmeda
toco y respiro.
no espero nada
ya me dieron todo
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